Una estrella le dijo a la luna; ¡Qué hermosa eres! Déjame brillar a tú lado, para poder sentir algo de esa luz y ser yo quien ilumine junto a ella. A lo que la luna contesto; ¡Brillar junto a mi! No será necesario, ya que nosotras como estrellas brillamos en la oscuridad, brillamos para brindarles luz a las personas en la noche. La estrella le contesto; Al yo ser pequeña, no soy nada con tú luz, estorbaría mi pequeño destello... La luna como ultima respuesta dijo; Y yo al ser grande, soy el detalle de cada estrella en el cielo, y en la noche nosotras somos el espectáculo de las personas todos los días. No es necesario brillar para destacar, sino, brillar para crear y darle forma a la noche, y al ser pequeñas formamos un camino, y ese camino, es el que guía a los Dioses a su palacio.